No soy fan de Coldplay, pero esa nueva canción de la banda es sin duda una inteligente mezcla de todos los elementos que hacen un buen tema pop, a mi parecer. Ahora Coldplay enfrenta un litigio por plagio promovido por el virtuoso solista de la guitarra eléctrica Joe Satriani, que asegura que parte de su obra If I Could Fly fue copiada al crearse Viva la Vida. La noticia me hizo recordar lo absurdas que me parecen algunas implicaciones de los derechos de autor, especialmente en el área musical.
Después de investigar un poquito, me topé en YouTube con una comparación de ambas canciones que más sorprendido no me podía dejar. El parecido se reduce a tres notas con mismo orden y duración sobre una progresión armónica que no es idéntica. Además, la instrumentación es distinta y el aire de los arreglos es distinto, sin mencionar el hecho de que en el tema de Coldplay hay un verso cantado y en el de Satriani sólo se escucha la melodía de una guitarra.
¿Cuándo hay plagio en música? Las leyes sobre derecho de autor fijan un número de criterios para determinarlo, como, por ejemplo, un cierto número de notas sucesivas que sean idénticas en dos composiciones. Pero, yendo más allá, hay otras consideraciones que se habrían de ventilar en una corte que se dedique a casos de plagio, y una de ellas es la comprobable posibilidad de que quien se acusa de ello haya escuchado lo plagiado.
Ahora bien, se han compuesto una chorrera de millones de canciones desde que al ser humano se le ocurrió tararear algo por primera vez. Cada uno de nosotros ha escuchado un gran montón de composiciones desde que nacimos, pero no hemos podido escuchar toda la música que ha originado el hombre. Sin embargo, ¿debe un compositor escucharlo todo antes de crear una melodía para estar seguro de que no copiará nada? ¿Cuántas canciones existen con idénticos arreglos armónicos y estilísticos que nunca han merecido la etiqueta de plagio? Pues, casi todas, si vemos la proporción. Y cuando decimos que un nuevo artista musical "suena" como otro más antiguo es simplemente porque sus melodías y arreglos se parecen.
Al hablar de "influencias musicales", en realidad decimos que un artista escuchó tanto a ciertos otros que en su música ha acogido elementos que no son originalmente propios. En los años 60, todos los grupos buscaban sonar como los Beatles. Muchos tendrían la intención de aprovechar un pujante mercado discográfico que demandaba un producto musical específico, pero estoy seguro de que muchos otros sonaban como el cuarteto de Liverpool simplemente porque se sentían identificados con su innovadora manera de expresión artística y les parecía también propia esa forma de decir las cosas. En otras palabras, "sonar" como alguien supone una saludable dosis de plagio, y afirmar que en música todo es 100% original es como pretender asumir la autoría del idioma castellano.
El acto condenable ha de ser el cometido por un individuo que reproduce forma y fondo, nota por nota, verso por verso, arreglo y ejecución, aunque sea parcialmente, de una obra anterior y con conocimiento de ella, para luego decir que le pertenece como autor. Pero mover un sistema judicial para pelear por una melodía de tres notas en contextos enteramente disímiles, que ya se ha escuchado en muchas otras composiciones y que para nada afecta lo que distingue a cada una de ellas, me parece en extremo absurdo, más en un caso en el que ambas canciones, en esencia y diciéndolo sin un ánimo despectivo, son poco originales. No sé; prefiero pensar que Satriani está siendo objeto de mala asesoría jurídica. Si no fuese así, sería otro ejemplo de esa doble moral que sigue hundiendo a la industria musical tradicional.
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